Hace un buen tiempo conocí una mujer, aunque ella ya me conocía,
incluso antes de saludarla por primera vez.
Era bella, su pelo negro y corto contrastaba con su hermoso
rostro; tus ojos te miraban y te dejaban totalmente absorto y perdido en su
belleza… y su sonrisa… su sonrisa te hipnotizaba al instante. Su vida era como
la de cualquier persona, a veces tenia risas, otras lágrimas, trabajaba duro
por lo que quería, tenia todo totalmente planificado; pero lo sentía inútil… siempre sabría lo que sucedería.